“La métrica realizada por el CIDE el año pasado fue un ejercicio desafortunado” consideró el doctor en Derecho y Comunicación Ernesto Villanueva y precisó que “la intención de esta métrica era medir el cumplimiento de la ley, pero esto desafortunadamente no fue así, y arrojó resultados poco claros, en donde los estados que participaron en la elaboración de la metodología “extrañamente” mejor calificación sacaron”, así lo declaró en el evento “Periodismo, reforma electoral y transparencia” organizado por el Foro de Periodistas de Chihuahua, el Instituto Estatal Electoral y el Instituto Chihuahuense para la Transparencia y Acceso a la Información Pública.
Al precisar su punto de vista comentó que “se debe hacer la métrica pero con estos dos elementos: con una metodología rigurosa, y segundo que todos se encuentren en las mismas circunstancias para que sea medible todo lo que deba ser medible”.
Ponente de la conferencia “Periodismo y transparencia” afirmó que “el derecho de acceso a la información pública se ha convertido en una herramienta fundamental para una mejor ejercicio periodístico, la herramienta esta ahí y esta a disposición de todos”.
Villanueva Villanueva es coordinador del área de información jurídica de la UNAM y destacó en este evento, realizado en el edificio de Seminarios de la UACh, que transparencia y libertad de expresión son temas profundamente relacionados. En este sentido, mencionó que “la transparencia, por sus propias características debe ser precisamente un derecho, un sistema que permita el acceso a la información en poder los sujetos obligados como son las entidades y dependencias públicas, lo que sin duda esta teniendo un impacto en el ejercicio de la libertad de expresión, particularmente cuando se trata del ejercicio de este derecho con un carácter profesional, es decir, cuando se ejerce a través del periodismo”.
Al precisar los elementos que vinculan el derecho de acceso a la información con la libertad de expresión mencionó que la transparencia esta permitiendo pasar, poco a poco, de un periodismo de “declaraciones” a un periodismo de hechos, dejando de lado, como nota relevante, los dichos de alguien que se tiene como importante, para privilegiar la información.
“El acceso a la información pública va generando un periodismo de precisión, un periodismo veraz, objetivo, mucho más cercano a la verdad”.
Asimismo, mencionó que con la transparencia y el acceso a la información el ejercicio tradicional de la labor periodística ha ido cambiando. Así por ejemplo, con el uso de estas herramientas, el columnista editorial tradicional va perfeccionando y complementando su trabajo, para convertirse en lo que se denomina analista especializado, lo que redunda en una mejor calidad de información.
Un elemento más a considerar, en su opinión, es que “el acceso a la información pública está también transformando el periodismo de la “nota diaria”, ya que al poder contar con mayor información, la “nota diaria” toma va transformándose en un periodismo de investigación, lo que eleva su calidad informativa”.
Al referirse a los problemas y retos que enfrenta la libertad de expresión actualmente destacó, en primer lugar, la protección a los periodistas. “Tema bastante complejo, donde no hay en principio una solución univoca, hay distintas aproximaciones y yo no veo que haya una solución integral. Se debe proteger la facultad de expresión con mecanismos materiales para poder ejercerlo. En este sentido el estado debe cumplir y hacerse cargo de la seguridad no solo de los periodistas sino de todos los ciudadanos, y garantizar la libre expresión de ideas y puntos de vista, de lo contrario este derecho quedará mutilado o inexistente. Recordemos que la libertad de expresión no es un derecho de los periodistas, es un derecho de todos”.
En una de sus reflexiones finales destacó que “debemos tener claro que el acceso a la información pública puede mejorar la calidad de la información. Se informa de mejor manera y se vende más”.
